miércoles, 18 de noviembre de 2009

LAS RELIGIONES

BUDISMO

El budismo es una religión no teísta perteneciente a la familia dhármica y, según la filosofía hindú, de tipo nastika. El budismo ha ido evolucionando en la historia hasta adquirir la gran diversidad de escuelas y prácticas hoy presentes



El budismo se desarrolló a partir de las enseñanzas difundidas por su fundador, Siddhartha Gautama, alrededor del siglo V a. C. en el noreste de la India. El budismo inició una rápida expansión hasta llegar a ser la religión predominante en India en el siglo III a. C. En este siglo, el emperador indio Asoka la hace religión oficial de su enorme imperio, mandando embajadas de monjes budistas a todo el mundo conocido entonces. No será hasta el siglo VII EC cuando iniciará su declive en su tierra de orígen, aunque para entonces ya se habría expandido a muchos territorios. En el siglo XIII había llegado a su casi completa desaparición de la India pero se había propagado con éxito por la mayoría del continente asiático.

El budismo ha significado un motor principal en la difusión de la escritura, el lenguaje, y la adopción de valores humanistas y universalistas. Es por tanto la gran filosofía de Asia porque su práctica ha logrado expandirse a la totalidad de sus países. Desde el siglo pasado se ha expandido también por el resto del mundo. Al carecer de una deidad suprema pero mostrar a la vez su carácter salvífico y universalista, ha sido descrita también como fenómeno transcultural, filosofía, o método de trasformación.
El budismo es en número de seguidores una de las grandes religiones del planeta.Contiene una gran variedad de escuelas, doctrinas y prácticas que históricamente y bajo criterios geográficos se clasifican en budismo del Sur, Este y Norte.

El budismo no está organizado con una jerarquía vertical. La autoridad religiosa se basa en los textos sagrados; los Sutras (literalmente ‘discursos’). Además de eso, hay un numeroso material de interpretación en el que contribuyen maestros y personajes a través de la historia que los han comentando y analizado.

La comunidad monástica se organiza históricamente por líneas de transmisión en el tiempo, y en algunas escuelas las cadenas de relaciones entre maestros y discípulos son centrales. Los laicos tienen distinto papel dependiendo de las dos grandes ramas, Theravada (‘escuela de los ancianos’) y Mahayana (‘gran vehículo’). En el budismo mahayana, la vida laica se considera tan útil para alcanzar el Nirvana como la vida monástica, mientras que en el theravada se da un énfasis a la vida monástica. Otra clasificación muy común es identificar a una tercera rama; el Vajrayana (o Tántrico), que se puede considerar una parte o una división del Mahayana.

Esta organización religiosa descentralizada ha permitido una enorme flexibilidad de puntos de vista, variaciones y enfoques. Las variantes de budismo se dieron por divisiones en el tiempo de puntos de discusión doctrinales, como un árbol ramificado.

Cantidad de budistas en el mundo

Población budista. Rojo: países donde un alto porcentaje de la población es budista. Morado: población significativa.
Templo budista en Singapur.En general el budismo se fue implantando en muchos países sin entrar en conflicto directo con las religiones autóctonas, sino en muchos casos, intercambiando influencias. A diferencia de otras religiones el budismo no conoce la noción de guerra santa, la conversión forzada, ni tampoco considera la noción de herejía como algo siempre pernicioso. Aunque han existido algunos episodios históricos de enfrentamientos violentos por cuestiones de doctrina o de acoso a personajes disidentes o algunas minorías, éstos son excepcionales para una religión que se convirtió en la mayorítaria de Asia durante un recorrido histórico de 2.500 años. El pluralismo de enfoques y la aceptación de distintos puntos de vista doctrinales ha sido históricamente algo compartido y aceptado en la comunidad budista, lo que ha dado lugar a una enorme cantidad de literatura religiosa y filosófica.

Las estimaciones sobre el número de budistas en el mundo varían significativamente, según diferentes fuentes disponibles[14] [15] [16] [17] entre los 1691 millones[18] y los 230 millones.[19] Esto significa que el budismo es de las mayores religiones de la humanidad en número de seguidores. Estas cifras han aumentado considerablemente tras las recogidas en el siglo XX, sobre todo porque en países como China empiezan a aparecer los datos tras su apertura política. Así mismo, en India se han dado conversiones masivas al budismo de cientos de miles de personas pertenecientes a la casta de los intocables (Dalits).

La mayoría de los budistas están en Asia. Para obtener una cifra mundial más exacta, la principal dificultad es dar una cifra sobre China. El budismo posee un importante arraigo histórico en ese país, sin embargo es oficialmente un país ateo, en el que además se practica una religión popular tradicional muy heterogénea y sincretista que, entre otros, incluye elementos budistas, y que con frecuencia se lista por separado.

En los países de Occidente el número de budistas ha crecido significativamente en los últimos 50 años. En Europa Occidental cuenta 20 millones de seguidores y es hoy el 5% de la población. En Estados Unidos el budismo tiene una gran implantación con unos 6 millones de seguidores.

Estudios y educación

En el ámbito educativo, el budismo se estudia como especialidad en algunos de los principales centros universitarios occidentales.[20] Las universidades más prestigiosas (Oxford, Harvard, Lausanne, Berkeley, Milan...) tienen sección de estudios de religiones y lenguas orientales con especialidad sobre budismo. En la mayoría de países laicos está reconocida como religión por el estado. Excepciones ocurren en países como España en donde no hay estudios universitarios ni cifras oficiales. En este tipo de países existe una situación de confesionalidad encubierta, en donde no se atiende a la existencia de otras religiones aunque se las respeta.[21] Este fenómeno existe principalmente en países semi-democráticos o en vías de desarrollo, en donde la religión mayoritaria influye en la aplicación de las constituciones de esos países. En el campo académico, en España y a semejanza con lo que ocurre en diversos campos de la ciencia, han existido y existen unos pocos expertos de religiones y lenguas orientales, pero han tenido que abandonar el país para poder trabajar al igual que ocurría en la época franquista.[22] En España hasta la fecha sólo se enseña teología católica, si bien últimamente el budismo se imparte como asignatura en paquetes de postgrado inaugurados recientemente llamados de "Estudios de Asia Oriental". España fue el primer país europeo en contactar con Asia, si bien la ausencia prolongada de estudios de religiones orientales resultar explicable por sus frecuentes régimenes confesionales y su atraso en asimilar la herencia de la ilustración europea. En un panorama distinto, en Latinoamérica existen algunas universidades con producción propia en países como Argentina, Brasil o México, desde donde han surgido autores y traductores de prestigio internacional.

Doctrinas

Estatuas budistas.También llamado el Dharma (en sánscrito, significa: soporte, apoyo, lo que mantiene, la ley, la verdad, la auténtica naturaleza de la realidad, el camino), los Fundamentos budistas son la base de las enseñanzas del budismo.

A pesar de una enorme variedad en las prácticas y manifestaciones, las escuelas budistas comparten principios filosóficos comunes. El estudio más profundo y la práctica más intensa, solía limitarse en oriente a las órdenes monásticas. En la actualidad sólo el budismo theravada tiene un énfasis en la vida monástica a detrimento de la vida laica. Las otras corrientes desarrollan y elaboran sobre determinados aspectos del budismo original de la India.[23]

Todos los elementos de las enseñanzas filosóficas fundamentales se caracterizan por estar estrechamente interrelacionados y contenidos en otros, por lo que para alcanzar su entendimiento se necesita una visión holística de su conjunto. Además, se suele subrayar el hecho de que todas las enseñanzas son solo una manera de apuntar, guiar o señalar hacia el Dharma, pero del cual debe darse cuenta el mismo practicante. El Dharma solo puede ser experimentado o descubierto de manera directa a través de una investigación y disciplina práctica personal.

Puntos importantes para entender el camino budista

Algunas ideas erróneas sobre el budismo
Véase también: Dificultades occidentales para definir el budismo
El "despertar" budista no es debido a una revelación divina, sino que se produce como un descubrimiento directo y personal de la realidad última. Un Buda no es un dios, ni un mesías, ni un profeta. El budismo no afirma a un creador del universo como causa útlima de la realidad, y sus enseñanzas no son percibidas por sus seguidores como dogmas.



El problema del que parte el budismo
El propósito del Budismo es la erradicación definitiva del sufrimiento, insatisfacción vital, o descontento que se manifiesta de manera inevitable en uno u otro momento de la vida. Acorde al pensamiento budista, la causa de la insatisfacción (frustración, tensión, etc..) es el deseo (‘sed‘ entendido como los movimientos de la voluntad para la aproximación o el rechazo, surgiendo aferramiento, aversión, temor, etc...).

Todas estas ‘pasiones‘ se desarrollan por un "yo" que es vivido como totalmente existente y que de ese modo los padece. Pero debido a que el "yo" es una entidad que depende de varios factores para poder existir, es considerado en el budismo como una ilusión que depende de ellos. Es por tanto un efecto que surge de la ‘ignorancia‘, es decir, de una percepción errónea de la vida, la existencia y el ser. El "yo" es por tanto mantenido como el resultado de un proceso continuo de cinco agregados que varían a cada instante.

Véase también: Cuatro nobles verdades, Duḥkha, Transitoriedad, Tṛṣṇā y Cinco agregados
Cuándo estaría solucionado el problema según el budismo
El cese definitivo de este problema se da, según el budismo, tras el ‘despertar‘, que ocurre como resultado del cultivo (Bhavana) de las enseñanzas de Buda. Este despertar supone el cese de una errónea posición respecto a la realidad y la vida. Este cese se produce según algunas escuelas budistas mediante un aprendizaje progresivo y según otras mediante un aprendizaje centrado en la intuición y la espontaneidad. Ese cese (Nirvana) implica que la persona ‘se da cuenta‘ por él mismo de manera directa de la verdadera naturaleza de la realidad y de él mismo. El despertar consiste pues en la experiencia directa más allá del entendimiento intelectual de que los objetos y fenómenos de la realidad (incluida la propia persona) no existen exactamente de la manera en que eran vividos anteriormente.

Esta experiencia de transformación lleva a un nuevo estado no expresable con conceptos o palabras; en donde se alcanza el potencial innato ‘desvelando‘ una profunda e inherente sabiduría y compasión por todos los seres vivos.


Confucianismo





El confucianismo, a veces también llamado confucionismo, es el conjunto de doctrinas morales y religiosas predicadas por Confucio. El nombre en chino de su escuela podría ser traducido por Escuela de los Letrados. El confucianismo ha ejercido una gran influencia sobre China, Corea, Vietnam y Japón. Fue la religión oficial de China hasta el siglo VII. El canon de la filosofía confuciana lo componen los Cuatro Libros. Su pensamiento se formó durante un largo período que abarca las épocas de Primaveras y Otoños y Reinos Combatientes (siglos VII al III adC). Cuando China fue reunificada por Qin Shi Huang (221 a. C.), ya era una doctrina perfectamente formada y definida, con muchos seguidores y un gran corpus textual. Luego de la breve dinastía Qin, su núcleo fundamental se ha mantenido intacto, excepto por posibles errores de transmisión e interpolaciones que sólo afectan lo accidental.

Como para la mayor parte de sus contemporáneos, los confucianos ven al cosmos como algo armónico que regula las estaciones, la vida animal, la vegetal y la humana. Si esta armonía era trastornada, habría graves consecuencias. Un ejemplo común que utiliza el confucianismo es el del mal gobernante que conduce a su pueblo a la ruina mediante su conducta.

El mal gobierno contraría el orden natural y viola el Mandato del Cielo. El gobernante que se conduce así pierde su legitimidad y puede ser depuesto por otro que recibirá este mandato.


Doctrina


Culto a los antepasados

Los confucianos eran practicantes de un culto que giraba alrededor de la adoración a los antepasados y de poderes entre los cuales el Cielo era el más claro. El Señor de lo Alto (Shangdi), que es a veces mencionado, era algo más arcaico. Cuando aparece en los textos de los Cuatro Libros, el Cielo es un poder superior, que no está ni personalizado ni tan separado del mundo. No es algo pasivo, pues de él vienen los mandatos y acciones, pero no es un dios del tipo judeocristiano. El Señor de lo Alto aparece como una divinidad suprema en los huesos adivinatorios de la dinastía Zhou. Los textos confucianos, al remontarse a épocas de la Antigüedad, lo mencionan a veces.

El culto a los antepasados tiene una gran importancia. Implica la creencia de que las almas de los difuntos pueden beneficiar o castigar a sus descendientes. Su evolución posterior lo convirtió en un rito cívico simbólico. Sin embargo, ni Confucio ni Mencio hablan de esa forma del culto a los antepasados. Otro elemento de importancia en el confucianismo es el rey o emperador, también llamado el Hijo del Cielo. Él sería quien mediaría entre el Cielo y los hombres. El gobernante chino tiene el mandato y con él la autoridad de celebrar ritos.

Armonía con el cosmos

Según el confucianismo, el hombre debe armonizarse con el cosmos, es decir, estar de acuerdo a lo ordenado por el Cielo. Para ello, debe autoperfeccionarse mediante la introspección y el estudio. Si el hombre lo logra, tendrá conocimiento de sí mismo y de los deseos del Cielo, lo que le servirá para desarrollar su Li, que significa los ritos, las ceremonias, la rectitud y las buenas formas interiorizadas. El Li es útil para desarrollar el Ren que se podría traducir por “buenos sentimientos hacia los demás hombres”. La práctica del Ren supone las virtudes Zhong y Shu, que se traducen aproximadamente como “lealtad” y “perdón”, o como “fidelidad” y “compasión”. Si el hombre tiene Ren, podrá fácilmente practicar la justicia, los buenos principios, llamados Yi.

El Yi y el Li

En el confucianismo, Yi se opone a Li, siendo este último de diferente tono y grafía al Li anteriormente citado que significa ritos o ceremonia. El Li opuesto a Yi significa beneficio, ganancia, lo que supone alejamiento de la generosidad que exige Ren. El hombre que practica las anteriores virtudes es un Junzi, un hombre superior. El término viene de las clasificaciones jerárquicas que denotaban a los nobles y caballeros. Se opone a Shunin, los plebeyos. Sin embargo, en el confucianismo el término resalta superioridad moral, sin relación al origen social. El Junzi sería educado y justo, la (virtud) le sería inherente y siempre estaría en el Justo Medio, que indicaba la necesidad de moderación en todo. Además, el Junzi conoce y respeta los mandatos del Cielo, y conoce el propio.

El confucianismo nos sostiene que hay pocos hombres superiores y que la mayoría la conforman los Xiaoren, literalmente hombrecillos. Ellos son hombres vulgares que no se elevan a lo mejor de la humanidad. Debido a esto, el hombre superior tiene la misión de ocupar cargos públicos para poder dirigir a la sociedad. Este punto es importante ya que la (burocracia) de la China posterior llegó a identificarse mucho con esta idea, dando lugar a gran espíritu de servicio en las buenas épocas. Sin embargo, en los tiempos de decadencia, como pudieron verlo los europeos en el (siglo XIX), era mayormente una doctrina seca e hipócrita, muy lejos de los pensamientos del confucianismo.

La sociedad en el confucianismo

Estatua de Confucio en bronce.El confucianismo ve solamente al hombre realizado en tanto ser social que ocupa un puesto y desempeña una función, no como un ser aislado. En la idea confuciana de la sociedad utópica, la jerarquía no es sólo social, sino también moral. En la China antigua, la familia no era un núcleo reducido, sino un gran clan, muchos de sus miembros vivían bajo un mismo techo, reconocían un antepasado en común y mantenían vínculos con otros grupos del mismo origen.

Una familia así era una prefiguración del Estado. Así, la familia era vista como un pequeño reino con jerarquías, protocolos y métodos de gobierno, y el Estado como una gran familia en la que debe haber afectos, relaciones y obligaciones morales. En la familia, los miembros están jerarquizados mediante un complejo sistema. Para el confucianismo, el aprecio, el amor y las relaciones que había entre los miembros debían estar graduadas según cada persona, su puesto, etc. En consecuencia, había términos para significar el amor por los padres o piedad filial (Xiao), el amor de los padres por su hijos (Ci), etc.

El aprendizaje del hombre superior se iniciaba en la familia y dificultosamente podrá el hombre gobernar el Estado si no puede gobernar primero su familia.

A pesar de lo dicho anteriormente, para los confucianos todos los hombres son de naturaleza básicamente igual, independiente de su posición o lugar de nacimiento. Pero no pueden mantenerse iguales ya que sería perjudicial para el buen funcionamiento social.

[editar] Métodos del confucianismo
Los medios para alcanzar la máxima excelencia o Zhi shan eran dos: el estudio y la introspección, entendida como un mirar hacia dentro, es decir, el conocimiento pleno de uno mismo.

El estudio de textos antiguos y de las lecciones de los sabios y la naturaleza es la base de la mejora individual. Además, sirve como soporte para la introspección porque el hombre debe ver que hay de bueno dentro de sí y desarrollarlo. La bondad natural humana, capital en las enseñanzas de Mencio, parte del mismo principio de que lo bueno se encuentra dentro del hombre y que debe ser descubierto usando la introspección. Así, un hombre superior podrá obtener Ren y Li.

También el confucianismo da gran importancia a los ritos. Al ser una forma de conservar el pasado mítico que fue legado, el confucianismo apoya que se los siga practicando y les da nuevos valores. Eran vistos por los confucianos como un símbolo de jerarquía y poder. Además, son un método de autodisciplina y dominio de uno mismo, al hacer que el individuo deba realizar algo de una manera precisa.

Los ritos garantizan que la sociedad y el Estado funcionen correctamente, ya que las acciones del gobierno deben tener orden y jerarquía.

La rectificación de los nombres

Para el confucianismo, la rectificación de los nombres es el principio y la consecuencia de muchas de sus ideas. Su fundamento es el siguiente: las palabras tienen significados precisos y, por eso, si se denomina a una cosa con un significante que no le corresponde, se comete un error.

Esta idea se desarrolla hasta llegar a los temas que más interesan a los confucianos. Por ejemplo, si a un usurpador se le llama rey, se comete un error, ya que no es un verdadero rey. Lo mismo sucede si un rey legítimo no se comporta como tal. También esta idea vale para un padre que no se comporta como padre, un hijo que no se comporta como hijo, etc. Así, la rectificación de los nombres se transforma en una herramienta para corregir a la sociedad y evitar que sea engañada.

Extensión del Confucianismo

El Confucianismo sobrevivió su supresión durante la dinastía de Qin gracias en parte al descubrimiento de obras clásicas ocultas en las paredes de la casa de un erudito. Después de Qin, con la nueva dinastía Han, el estudio de las obras clásicas del Confucianismo se convirtió en la base del sistema de exámenes del gobierno y del plan educativo. No se presentó ninguna tentativa seria para sustituirlo hasta el movimiento del 4 de mayo en el siglo XX.

Después de su reformulación como Neo-Confucianismo de Zhu en el s. XI, con Wang Yangming y otros Neo-confucianos, también se aceptó como filosofía de estado en Corea y Japón. A Corea con la dinastía Chosun se le ha llamado un “estado confucianizado.”




Cristianismo





El cristianismo es una religión monoteísta de origen semita que se basa en el reconocimiento de Jesús de Nazaret como su fundador y figura central. Sus seguidores creen que Jesús es el hijo de Dios, así como el Mesías (o Cristo) profetizado en el Antiguo Testamento, muriendo en redención de los pecados del género humano, y resucitando después su muerte.

Ya desde los primeros tiempos de difusión de las ideas de Cristo y de las diferentes escuelas que formaron los discípulos suyos al final de su vida y su ministerio históricos, biográficos y humanos,[2] surgieron diferencias muy significativas respecto del papel e importancia de Cristo, de su rol redentor, de su naturaleza, y de su posterior deificación, y de muy numerosas cuestiones doctrinales referentes a su predicación, ideas y enseñanzas, la selección de textos que pudieron haberlas descrito de forma más correcta —el Nuevo Testamento, los llamados Logia (dichos o palabras) de Jesús, o bien, los evangelios y escritos gnósticos y apócrifos—, y la interpretación —textual o contextual— de sus cuerpos de textos sagrados.

De hecho, de los 12 que, según el testimonio de dos de los llamados Evangelios canónicos, habrían sido investidos como apóstoles de forma original, sólo 5 de ellos dejaron documentos que fueron admitidos en el Canon del Nuevo Testamento, el resto de los 12 —incluyendo a Iscariote—, y algunos de los 5 ya antes mencionados, pasaron a la historia como autores de documentos gnósticos, que, al paso de los siglos, dejaron de ser vistos como textos sagrados, llegando a ser tenidos por apócrifos.

Debe tenerse en cuenta que el nombre de cristianos ha sido compartido desde entonces, a través de los siglos, y no siempre de formas muy armónicas, por grupos numerosos de creyentes, cada cual, a su vez, llegó a desconocer como cristianos a grupos con posturas dogmáticas concretas distintas de las propias (de las de ese mismo grupo en especial). Dicho de otra forma, el nombre de cristianos es el nombre común de grupos tan distintos entre sí como los gnósticos, arrianos, cristianos ortodoxos adherentes al dogma calcedonio, cristianos ortodoxos divergentes del dogma calcedonio, católicos romanos, cátaros o albigenses, templarios y masones, angloepiscopalianos, grupos preprotestantes, protestantes y paraprotestantes de todas las tendencias, y otros tipos de grupos que reflejan posturas dogmáticas concretas bastante más disímiles.

A través de los siglos, todos estos distintos grupos confesionales, o al menos doctrinales, reivindican a Cristo como su Maestro, y no pocos de ellos como su Líder, Rey, Señor o Dios, y algunos, así mismo, como su Redentor o Salvador, acogiendo con gusto y proverbial cariño todas sus enseñanzas —o cuerpos doctrinales que en su nombre les fueron entregadas—, y dando testimonio de estos hechos de múltiples maneras, que incluyen el dejarse privar de la existencia antes que renegar de su adhesión a él.

Dentro de sus textos y escritos sagrados, comparte con el judaísmo el Tanaj, el cuál constituye, junto con la Biblia Septuaginta (más antigua que el Tanaj), la base y la fuente para el Antiguo Testamento de las diferentes Biblias cristianas. Por este motivo es considerada una religión abrahámica junto al Judaísmo y al Islam.

Sus inicios datan del año 33[3] aproximadamente, cuando era considerada una secta judía al igual que otras creencias de la época.[4] Desde que el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio Romano en el siglo IV, ha influido de manera significativa en la cultura occidental y en muchas otras culturas a través del mundo. En la actualidad posee más de 2.100 millones de fieles,[1] o cerca de un tercio de la población mundial, siendo la religión con más seguidores del mundo.

La palabra "cristianismo" proviene del griego χριστιανός, christianós, cristiano, la cual a su vez proviene del nombre propio Χριστός, Christós, Cristo, traducción del hebreo "Mesías" que significa "Ungido". El origen del término se indica en el libro de Hechos de los Apóstoles:

«Después de esto, Bernabé fue a Tarso a buscar a Saulo, y cuando lo encontró, lo llevó a Antioquía. Allí estuvieron con la iglesia un año entero, enseñando a mucha gente. Fue en Antioquía donde por primera vez se les dio a los discípulos el nombre de cristianos»




Escrituras

Biblia Vulgata.Existe dentro del cristianismo una agrupación de libros en lo que se conoce como Biblia, que contiene texto sagrado para su consideración y obediencia. Las distintas denominaciones cristianas varían en cuanto a la forma de traducción e interpretación de dichas escrituras.

Textos

Virtualmente todas las iglesias cristianas aceptan la autoridad de la Biblia, lo cual incluye el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento, si bien el canon bíblico, o libros que se incluyen, difieren entre las diferentes denominaciones, como es el caso del Antiguo Testamento.

Las distintas iglesias cristianas ortodoxas, así como distintas iglesias nestorianas y eutiquianas, y la iglesia católica, incluyen en sus Biblias otros libros llamados los deuterocanónicos, que las comunidades cristianas primitivas habían recibido en la Biblia Septuaginta, bastante más extensa que el Tanaj judío hebreo-arameo, de las comunidades israelitas de habla griega de todo el Mundo Clásico.

Debido a la ignorancia de algunos de los padres de la iglesia de esta transferencia cultural, la iglesia occidental mantuvo una postura bastante reservada hacia estos escritos, los deuterocanónicos, durante muchos Siglos. Durante la Reforma protestante del Siglo XVI, Lutero decidió que no eran inspirados, y retomó el Tanaj como su fundamento para el canon del Antiguo Testamento. En medio del debate suscitado, la iglesia occidental optó por recibirlos finalmente como parte del canon.

Las distintas iglesias cristianas ortodoxas, nestorianas de Oriente y eutiquianas de África, jamás participaron del debate: conocían más de cerca el origen de los libros, sabían perfectamente lo que habían recibido, y no necesitaron pronunciarse. El canon de sus Biblias es bastante más amplio que el canon de la iglesia latina occidental, e incluye el Salmo 151, la Oración de Manasés, el Libro III de Esdras y el Libro III de los Macabeos. (Además de éstos, el Libro IV de Esdras y el Libro IV de los Macabeos figuran, así mismo, en muchas importantes versiones y ediciones de la Biblia.)

Cada grupo cristiano suele llamar apócrifos a todos los escritos no incluidos en su versión del canon, si bien las diferentes confesiones dentro del cristianismo coinciden en el uso de este término para hacer referencia a los textos excluidos del canon de las Biblias cristianas ortodoxas. Solamente la iglesia latina, y algunos protestantes respetuosos, llaman deuterocanónicos a los libros católicos ausentes de las Biblias protestantes. Las iglesias de Oriente rechazan de manera terminante el uso occidental de distinguir los libros propios del canon amplio, de los protocanónicos comunes a todos los cristianos.

Algunos grupos cristianos también han generado escrituras adicionales y son consideradas como escritura "inspirada". Ejemplos muy conocidos incluyen el Libro de Mormón, que declara ser otro Testamento de Jesucristo, Doctrina y Convenios, y la Perla del Gran Precio empleados por los mormones; o las escrituras de la fundadora de la Ciencia Cristiana, Mary Baker Eddy.

Otros, como los Testigos de Jehová, han producido sus propias traducciones de la Biblia en los que se asegura que son la única traducción totalmente confiable. Esta elevación de otras escrituras al mismo nivel de las escrituras aceptadas es la mayor causa de disputas entre estos grupos y las principales corrientes cristianas. Se podría esperar que los luteranos y los calvinistas considerasen las interpretaciones de Lutero y Calvino respectivamente con similar reverencia, pero no es así; de hecho la mayoría de los teólogos católicos y protestantes están de acuerdo que no son de ninguna forma "inspirados".

El grado de sacralidad de los textos bíblicos varía entre las distintas denominaciones. En el catolicismo y la iglesia ortodoxa, el texto suele ser considerado per se digno de algún grado de culto, y es llevado en procesión y colocado en altares o lugares dignificados. En el protestantismo, el texto carece de este tipo de valoración y sólo es tomado en cuenta, en forma independiente al libro físico, el contenido de las escrituras y su interpretación.

Interpretación

Entre las distintas denominaciones cristianas no existe consenso en la interpretación de la Biblia, lo cual ha sido la principal causa de las divisiones históricas y presentes en la doctrina y práctica cristiana. La posición más extrema en cuanto a la literalidad y conservacionismo del contenido de la Biblia cristiana se ha denominado "fundamentalismo cristiano" y se asocia principalmente al protestantismo. Esto tiene relación a uno de los principios de la Reforma, que es la sola scriptura de acuerdo a lo cual, se ve a la Biblia como la única y final fuente de fe y doctrinas y asume que cualquier creyente cristiano es capaz de interpretarla.

Católicos, ortodoxos y algunos anglicanos consideran a la Biblia como una fase formativa de la tradición de la iglesia, la cual ha sido continuada mediante decisiones de los concilios ecuménicos, las escrituras de los Padres de la Iglesia y, en el caso del catolicismo, por declaraciones papales.

Una de las causas de las diferencias en las interpretaciones radica en la precisión con la que se han traducido los textos de los originales y se ha transmitido su sentido, con las consideraciones etimológicas y lingüísticas que corresponden.

Debido a esto, existen en el mundo numerosas traducciones de la Biblia, cuyo sentido, muchas veces, carece de la fiabilidad requerida y varía su sentido, hasta el punto de generar controversias doctrinales o de aplicabilidad entre quienes las interpretan.

La vida después de la muerte

Representación artística del PurgatorioLas visiones de los cristianos de la vida después de la muerte generalmente involucran el Cielo (también llamado Paraíso) y el Infierno. El catolicismo, desde los primeros siglos cree en un lugar intermedio llamado Purgatorio. A excepción de este último (cuyos habitantes entrarán finalmente al Cielo, después de una "purificación"), la permanencia en estas regiones es usualmente asumida como eterna. Hay, sin embargo, algunos debates en este último punto, por ejemplo entre los ortodoxos.

Muchos cristianos interpretan la "salvación" como la capacidad de entrar al Cielo (y escapar del Infierno) después de la muerte, aunque algunos teólogos han lamentado esta tendencia. La pregunta de "quién es salvo" ha sido considerada como un misterio por muchos teólogos, aunque los protestantes lo consideran como un tema de aceptación de Jesús como único Señor y Salvador, rasgo que es sólo la expresión de un hecho consumado para los predestinacionistas, como los calvinistas. La creencia de que todos serán o pueden ser salvos se conoce como universalismo que deriva de la idea de Apocatástasis aceptada entre otros por los ortodoxos griegos.

Generalmente no está claro cómo la vida después de la muerte se ajusta con la doctrina de la Resurrección General, en cuestiones como, por ejemplo, si la vida eterna comienza inmediatamente después de la muerte, o al final del tiempo; y si esta vida después de la muerte involucrará la resurrección de un cuerpo físico o en una forma espiritual glorificada. La mayoría de los cristianos aseguran que un alma sin conciencia sobrevive a la muerte física del cuerpo, aunque otros, rechazan esto diciendo que solamente los buenos serán físicamente "resucitados", mientras que los otros permanecerán en la tumba.

En cambio, algunos grupos, como los Adventistas del Séptimo Día, y los denominados Testigos de Jehová, aseguran que los muertos están inconscientes e impotentes en sus sepulcros, que no existe nada que sobreviva a la muerte del cuerpo físico, y que en la resurrección Dios devolverá la vida a quienes Él tenga en su memoria, tanto personas justas como injustas. Por lo tanto, lo que creen los Testigos es que la resurrección significará una reconstrucción completa de los seres humanos fallecidos que están durmiendo en el sueño de la muerte.

Algunas denominaciones cristianas, tratadas como apóstatas por las más numerosas o representativas corrientes existentes dentro del cristianismo, han promovido la creencia en la reencarnación (principalmente el Nuevo Pensamiento e iglesias de la Nueva Era) o fantasmas (muchas iglesias espiritualistas se identifican a sí mismas como cristianas). Estos grupos normalmente aseguran que tales doctrinas se pueden encontrar en la Biblia o en la tradición cristiana primitiva.

El fin del mundo

El Credo Niceno afirma que este mundo algún día llegará a su fin, cuando Cristo regresará (véase Segunda Venida) para juzgar a los vivos y a los muertos e inaugurar un cielo nuevo y una tierra nueva. Además de esta importante doctrina, los cristianos mantienen diferentes opiniones del tiempo, significado y naturaleza de los eventos que preceden el retorno de Cristo. Varias interpretaciones escatológicas como el Futurismo, añaden detalles como el reinado del Anticristo, el Armagedón, el Rapto, y el Milenio. Aunque son de mucha importancia para ciertos grupos, la mayoría de los cristianos y las denominaciones cristianas no le dan un gran énfasis a las enseñanzas escatológicas enfocándose en el Evangelio y las enseñanzas de Cristo. Algunos cristianos esperan que estos eventos ocurran en un futuro muy distante, mientras otros lo interpretan de manera simbólica.

Otros insisten que el Juicio Final es inminente, siguiendo una antigua línea de pensamiento el cual posiblemente se extiende a Jesús mismo. Aunque Jesús no dijo el "día o la hora" otros han intentado predecir el fin del mundo en el año 1000 (la "Larga Noche de Terror"), 1666, 1844 (la Gran Decepción de la historia del movimiento millerita), 2000 y 2001 por nombrar algunos episodios históricos. Tales expectativas son fácil blanco para el humor (por ejemplo, el Cuento de Miller de los Cuentos de Canterbury). Aun así, los principales grupos cristianos todavía afirman que algún día, el Juicio Final vendrá, y muchos no estarán preparados.

Algunos grupos sostienen que todos estos eventos ya estan ocurriendo. Los Testigos de Jehová afirman que "los últimos días" referidos en la Biblia comenzaron en 1914, y que Cristo se encuentra gobernando de manera "invisible" desde esta fecha. La Iglesia de la Unificación enseña que Cristo ha retornado en la persona de su fundador, Sun Myung Moon.

Doctrinas

Fracción del pan en la a Eucaristía.En línas generales, Jesucristo es para los cristianos el Hijo de Dios, por lo que sus prácticas se orientan hacia su relación con Dios, de la cual se desprenden sus actividades típicas.

Dentro de las prácticas ortodoxas y católicas, destancan especialmente siete sacramentos:

Bautismo, signo iniciático de introducción al cristianismo. (Bautismo en el Jordán por Juan Bautista);
Confirmación, signo que ratifica la fe en Jesucristo;
Eucaristía, signo litúrgico de la iglesia católica. (Última Cena);
Penitencia, signo de perdón, arrepentimiento de los pecados;
Orden Sacerdotal, por el que se inician los sacerdotes. (Lavatorio de pies);
Matrimonio, celebración de la unión de un hombre y una mujer ante Dios y la comunidad; y
Unción de los enfermos, signo de asistencia al enfermo.
Las diversas denominaciones surgidas tras la Reforma Protestante reconocen mucho menos de siete de estos en número variable; en general, los protestantes reconocen la naturaleza sacramental del bautismo y la Santa Cena (Eucaristía) y los de línea calvinista reconocen la profesión de fe equivalente a la Confirmación de los católicos, pero sólo cuando la persona ya es totalmente consciente de su salvación (actitud que también ha ido ganando aceptación entre varios grupos católicos)[cita requerida]. Grupos anabaptistas y hermandades añaden la inmersión.

Pentecostales y grupos carismáticos enfatizan los "dones del Espíritu" tales como la sanidad espiritual, profecía, exorcismo, hablar en lenguas, o (muy ocasionalmente) manejo de serpientes. Los cuáqueros niegan por completo el concepto de sacramento, pero sus "testimonios" de paz, integridad, uniformidad, y sencillez pueden ser mencionados como equivalentes funcionales. En general, la línea principal protestante tiende a ver a los rituales más una conmemoración que un misterio. Su concepto de prácticas cristianas incluye actos de piedad personal como la oración, lectura de la Biblia, y un intento de vivir de una forma moralmente correcta. Una profunda tradición dice que es imposible para la gente el reformarse por sí misma, pero que ese progreso sólo puede ocurrir con la gracia de Dios.

Bautismo

Representación del bautismo de JesúsEl bautismo es un rito usual por medio del cual se hace una bienvenida al cristianismo. Involucra el rociar o derramar agua en la frente o la inmersión en agua. Se puede aplicar tanto a niños como a "creyentes adultos" (el cual puede incluir jóvenes adolescentes). Algunas tradiciones, como la que mantienen los bautistas insisten que el bautismo por inmersión de adultos creyentes es el único método válido, debido a que la palabra para "bautismo" que aparece en el texto griego koiné en el que fue escrito el Nuevo Testamento, baptizein, significa "sumergir", zambullir". Otros, como los católicos y ortodoxos, han reconocido ambos métodos en todas las épocas, pero añaden restricciones de quién puede dirigir válidamente el ritual.

El bautismo proviene de la práctica judía de la inmersión (mikveh) para propósitos de un ritual de purificación. La práctica cristiana es derivada del llamado de Juan el Bautista al arrepentimiento (metanoia), y, según el catolicismo, es para purificación del pecado original o, según la práctica protestante, para manifestar públicamente un nuevo nacimiento espiritual. Al contrario que el ritual judío de la inmersión, un cristiano sólo se puede bautizar (válidamente) una vez.

[editar] Adoración semanal
En el libro Primera Apología de Justino Mártir (capítulo LXVII) se describe un servicio del siglo II, el cual se puede aplicar igualmente a la mayoría de las iglesias de hoy, que aluden los siguientes componentes.

Lectura de las Escrituras iniciando con una lectura del Antiguo Testamento, uno de los Evangelios o una Epístola. A menudo se ordenan sistemáticamente en un ciclo anual, usando un libro llamado leccionario.
Un sermón. En tiempos antiguos esto seguía a las lecturas de las Escrituras (caso que aún aplica en el catolicismo), en otros casos esto ocurre al final del servicio.
Oración congregacional y acción de gracias. Normalmente esto ocurre regularmente durante el servicio. Justino no menciona esto, pero algunas corrientes cristianas los entonan como himnos. El Padrenuestro es comúnmente recitado. En muchas corrientes protestantes esto ha sido sustituido por cánticos.
La Eucaristía (también llamada Comunión Santa), es un ritual en el que pequeñas cantidades de pan y vino se comen y toman. Los protestantes dicen que representan el cuerpo y la sangre de Cristo; ortodoxos y católicos dicen que se transforman al cuerpo y la sangre de Cristo (la doctrina de la transustanciación). Las iglesias en la familia "litúrgica" (ortodoxos, católicos y algunos anglicanos) ven esto como la parte principal del servicio, mientras que los protestantes lo celebran de manera menos frecuente. En muchos casos hay restricciones de quién pueda tomar parte, por ejemplo, sólo católicos que no se encuentren en pecado mortal pueden tomar parte de ella en una Iglesia Católica.
Una "recolección" de "ofrendas" en el que a las personas se les pide que contribuyan con dinero. Los cristianos tradicionalmente usan estos dineros no sólo para mantener la iglesia, sino también para obras de caridad de varios tipos.
Existen un alto número de variaciones o excepciones; en algunas ocasiones, rituales como bautismos o bodas se incorporan al servicio. En muchas iglesias de hoy, los niños y los jóvenes son excusados de ir al servicio principal para ir a la Escuela Dominical. Muchas denominaciones se desvían del patrón general en una forma más fundamental. Por ejemplo, los Adventistas del Séptimo Día se reúnen en sábado (el Sabbath bíblico), no como el resto de las ramas del cristianismo, que las realizan en domingo. Pentecostales y carismáticos aseguran moverse espontáneamente en el Espíritu Santo, en vez de seguir un orden formal de servicio. En las reuniones de los cuáqueros, los participantes se sientan silenciosamente hasta que son movidos por el Espíritu Santo para hablar.

En algunas denominaciones (principalmente las litúrgicas), el servicio es dirigido por un sacerdote. En otros (principalmente entre protestantes), hay un ministro, predicador o pastor. Otros grupos pueden tener déficit de líderes formales, ya sea por principio o por necesidad local. Además, hay servicios "mayores" de iglesia, caracterizados por una gran solemnidad y rituales, y servicios "menores" en donde una atmósfera más casual prevalece, incluso si el servicio en cuestión es de naturaleza litúrgica.





En iglesias ortodoxas, la congregación tradicionalmente se mantiene a través de la liturgia. Los católicos romanos y muchas iglesias protestantes siguen algo predeterminado en donde los participantes se ponen de pie para cantar, se arrodillan para orar, y se sientan para escuchar (por ejemplo, en el sermón). Otros son menos programados, y pueden ser muy animados y espontáneos. Usualmente se incorpora música, y a menudo incluye un coro o un órgano. Algunas iglesias usan sólo música a capella ya sea como regla (muchas Iglesias de Cristo objetan el uso de instrumentos musicales en la adoración) o por tradición (como en la ortodoxa). Una tendencia reciente es el crecimiento de la "adoración integrada", la cual combina la liturgia con espontaneidad. Este orden en la adoración es a menudo un resultado de la influencia de la renovación carismática dentro de las iglesias que son tradicionalmente litúrgicas.

Estilo de vida cristiana

El Sermón del MonteAl contrario que en otras religiones, el cristianismo no ha desarrollado un código legislativo religioso, probablemente debido a que el Imperio Romano ya poseía un código penal funcional, haciendo innecesario para las autoridades cristianas el duplicar varias de sus prohibiciones.

Existe una gran tradición dentro del cristianismo al decir que Cristo excede las leyes del judaísmo; que el amor (a Dios y al prójimo) es el "Gran Mandamiento", desde el cual todas las otras leyes morales son obtenidas; que ningún ser humano puede esperar evitar el pecado completamente; que una persona no debe juzgar a otros (teniendo Dios ese único privilegio), entre otras.

Aun así, el Nuevo Testamento también contiene importantes guías morales para los cristianos. Jesús en el Sermón de la montaña le pide a sus seguidores, entre otras cosas, el amar a sus enemigos, ser preseverantes, misericordiosos, y humildes; en Marcos 10:21 le pide a un "joven hombre rico" vender sus posesiones, y darle el dinero a los pobres. Sin embargo, el pedido de Jesús en este caso no fue un enfoque en vivir una vida sin riqueza alguna, sino más bien desenmascarando la idolatría en el corazón de la mayoría de los ricos.

Algunos cristianos dicen que estas directivas son extraordinariamente difíciles, bordeando lo impráctico. Al mismo tiempo, la mayoría de los cristianos admiran a aquellos cuyas vidas parecen personificar estos principios, como Francisco de Asís, Albert Schweitzer o la Madre Teresa.

Algunos juicios morales de Jesús son más abordables, pero todavía no son de práctica general entre todos los cristianos. En el Sermón del Monte él habla en contra del divorcio (un tema controvertido en muchas denominaciones cristianas), y contra el juramento (una prohibición enfatizada principalmente por los cuáqueros).

Oración

Artículo principal: Oración en el cristianismo
Todas las versiones y variaciones conocidas del cristianismo practican la oración. Las oraciones cristianas puede ser formulistas, improvisadas o (según los carismáticos) inspiradas por el Espíritu Santo. Las oraciones normalmente se agrupan en categorías de acción de gracia, adoración, petición, intercesión y comunión. Las oraciones cristianas pueden ser dirigidas a Dios Padre, a Cristo o a un santo (en el caso de los católicos y ortodoxos). Los católicos han desarrollado una práctica devocional de orar el rosario. Entre las oraciones formulistas el Padre Nuestro y los Salmos, y en círculos católicos el Ave María son muy comunes.

La pregunta por de la eficacia de la oración está llena de diferendos teológicos. Algunas iglesias enseñan que la oración es capaz de alterar el ambiente físico, tomando en cuenta cosas como la sanidad espiritual. Ejemplos de este tipo de iglesias incluyen la Ciencia Cristiana así como varias iglesias del Nuevo Pensamiento.

Al final de cada oración, normalmente se dice Amén ("así sea").

Festividades

Católicos, cristianos orientales y cerca de la mitad de los protestantes siguen un calendario litúrgico con varias festividades.

Incluso cristianos que no siguen una tradición litúrgica se les puede ver celebrando Navidad y Pascua, aunque existen desacuerdo en cuanto a las fechas de celebración. Unas cuantas iglesias objetan el reconocimiento de festividades especiales, pero no obstante afirman los eventos que se celebran en las festividades. En esta materia, la encarnación y resurrección de Cristo se celebra en los servicios de cada iglesia.

Una antigua tradición en el cristianismo (probablemente inspirada en la tradición judía) y practicada por Jesús durante su vida, era el ayuno. El catolicismo distingue entre "ayuno" (que involucra tres comidas diarias, en las que sólo una puede incluir carne roja) y "abstinencia" (ninguna carne roja). El período de ayuno más conocido es la cuaresma. En la actualidad, la iglesia católica ha ido sustituyendo esta práctica por un ayuno que implica el privarse de algo deseable como ofrenda a Dios. Cerca de la mitad de los protestantes carecen de la tradición del ayuno. En iglesias evangélicas y denominaciones paradenominacionales, el ayuno se practica frecuentemente, muchos de los cuales lo llevan a cabo con abstinencia total de alimentos durante un lapso de tiempo, ingiriendo solamente agua.[6]

Símbolos

El símbolo más conocido del cristianismo es sin duda la cruz, del cual existe una gran variedad de formas, algunos afirman que la cruz es el primer logo exitoso a nivel mundial[cita requerida]. Varias denominaciones tienden a favorecer cruces distintivas: el crucifijo para los católicos -dentro del cual diversas órdenes religiosas también incluyen variantes para identificarse, como la Tau franciscana o la Cruz de Calatrava de los Dominicos-, la cruz ortodoxa para los ortodoxos, una cruz sin adornos para los protestantes. Sin embargo, no es una regla utilizar una u otra cruz. Otros símbolos cristianos incluyen el símbolo de un pez o Ichthys (del griego Ichthys) la cual se dice proviene del acrónimo I (Iesous), Ch (Christos), Th (Theou), Y (Hyos, la "h" el signo diacrítico en griego), S (Soter), o "Jesús, Cristo, Hijo de Dios, Salvador", el que fue utilizado por los Cristianos primitivos, al igual que el ancla. Constantino I el Grande utilizó también el Crismón para identificarse con el cristianismo, este último está formado por las primeras dos letras griegas del nombre "Cristo".



judaismo





El término judaísmo se refiere a la religión o creencias, la tradición y la cultura del pueblo judío. Es la más antigua de las tres religiones monoteístas más difundidas (junto con el cristianismo y el islam), conocidas también como «religiones del libro» o «abrahámicas», y la menor de ellas en número de fieles. Del judaísmo se desglosaron, históricamente, las otras dos.

Aunque no existe un cuerpo único que sistematice y fije el contenido dogmático del judaísmo, su práctica se basa en las enseñanzas contenidas en la Torá, también llamado Pentateuco, compuesto, como su nombre lo indica por cinco libros. La Torá o el Pentateuco a su vez, es uno de los tres libros que conforman el Tanaj (o Antiguo Testamento, según el cristianismo), a los que se atribuye inspiración divina.

Juega también un papel importante en la práctica religiosa la tradición oral que, según las creencias fue entregada a Moisés junto con la Torá y conservada desde su época y la de los profetas. La tradición oral rige la interpretación del texto bíblico; la codificación y comentario de esta tradición ha dado origen a la Mishná, al Talmud y a un enorme cuerpo exegético, desarrollado hasta el día de hoy por los estudiosos. El compendio de estos textos forma la denominada Ley Judía o Halajá.

El rasgo principal de la fe judía es la creencia en un Dios omnisciente, omnipotente y providente, que habría creado el universo y elegido al pueblo judío para revelarle la ley contenida en los Diez Mandamientos y las prescripciones rituales de los libros tercero y cuarto de la Torá. Consecuentemente, las normas derivadas de tales textos y de la tradición oral constituyen la guía de vida de los judíos, aunque la observancia de las mismas varía mucho de unos grupos a otros.

Otra de las características del judaísmo, que lo diferencia de las otras religiones monoteístas, radica en que se considera no sólo como una religión, sino también como una tradición y una cultura. Las otras religiones trascienden varias naciones y culturas, mientras que el judaísmo se considera la religión y la cultura de un pueblo específico. El judaísmo no exige de los no judíos unirse al pueblo judío ni adoptar su religión. La religión, la cultura y el pueblo judío pueden considerarse conceptos separados, pero están estrechamente interrelacionados. La tradición y la cultura judía son muy diversas y heterogéneas, ya que se desarrollaron de modos distintos en las diferentes comunidades, y cada comunidad local incorporó elementos culturales de los distintos países en los que vivieron los judíos a partir de la dispersión.


Doctrinas

La identidad judía no depende en primer lugar de la aceptación de creencias o del seguimiento de un modelo de vida determinado. Existen dos versiones sobre quiénes conforman la religión judía.

En primer lugar, la Ley judía y los ortodoxos defienden que aquel que ha nacido de madre judía lo es también. Así, todos los que sean capaces de demostrar que vienen de ascendencia judía por parte de una mujer son judíos por definición.

Por lo tanto, ser judío es una cuestión de descendencia física y, según la halajá, una persona judía puede ser cristiana o musulmana sin perder su condición formal de judío pero perdiendo los derechos religiosos (por ejemplo, el derecho a la sepultura en un cementerio judío).

En segundo lugar, los conservadores y los reformistas creen que son judíos aquellas personas que han 'nacido de madre y padre judíos, que se educan como tales y que expresan de manera explícita su deseo de formar parte en la comunidad.

Sin embargo, los rabinos reformistas que habitaban en América establecieron que los hijos de padre judío podían ser considerados como tales si recibían algún tipo de educación judía. Esto se debe a que un 57 por ciento de los hombres judíos decidían casarse fuera del grupo de mujeres judías.

A pesar de todo esto, convertirse al judaísmo es posible, pues en el Talmud se describe como el siguiente proceso: Los rabinos dicen: Si alguien llega y quiere ser un converso, ellos le dicen: "¿Por qué quieres ser un converso? ¿Acaso no sabes que los judíos están hostigados, acosados, perseguidos y acorralados, y que numerosos problemas los aquejan?" Si contesta: "Lo sé, y no soy digno", entonces lo reciben sin que sea necesario argumentar nada más.

Sin embargo, en la práctica será una tarea ardua y compleja. Hubo una época en la que la Iglesia cristiana consideró una grave ofensa la conversión de sus fieles al judaísmo. Sin embargo, no es ninguna ventaja, ya que la Torá debe ser seguida por toda la comunidad. Por tanto, se defendían con que no hay ningún tipo de provecho al convertirse al judaísmo ni motivo para fomentar la conversión.

Este punto es uno de los que más diferencia al judaísmo del cristianismo o del Islam, pues a estas dos últimas religiones monoteístas puede pertenecer cualquiera que profese y respete sus creencias.

Fundamentos del judaísmo [editar]Éstos son algunos de los principios sobre los que se basa la religión judía, o que la caracterizan.

El judaísmo se basa en el Tanaj (lo que los cristianos llaman Antiguo Testamento), compendio de 24 libros que cuenta la historia del hombre y de los judíos, desde la Creación hasta la construcción del Segundo Templo, e incluye también preceptos religiosos, morales y jurídicos; filosofía, profecías y poesía, entre otros. Sus cinco primeros libros, en conjunto conocidos con el nombre de "la Torá" o "Pentateuco", son considerados escritos por inspiración divina y por ende sagrados, y su lectura pública en la sinagoga los días lunes, jueves y sábados forma parte fundamental del culto judío, lo que le ha valido al pueblo judío el nombre de «Pueblo del Libro».
La Torá es la fuente primera de los siete preceptos morales básicos que obligan a todo ser humano como tal («Los siete preceptos de los hijos de Noé»; Génesis 9:1-7), y de los 613 preceptos religiosos que obligan a los judíos (613 mitzvot): 365 que imponen abstenerse de acción —uno por cada día del año— y 248 preceptos que obligan positivamente a hacer —uno por cada órgano del cuerpo—. Los preceptos bíblicos son comentados, explicados, ampliados e implementados por las diferentes exégesis que plasmaron por escrito las tradiciones orales: la Mishná y el conjunto en el que ésta está incluida: el Talmud.
Los preceptos jurídicos, éticos, morales y religiosos que emanan de la Torá, y que junto a su explicación de la Mishná conforman el corpus jurídico principal del judaísmo, el Talmud, son conocidos como la ley judía o Halajá (הֲלָכָה, "camino"), cuya fuente compilativa principal y reconocida por los judíos de todo el mundo —amén de una riquísima y amplia literatura halájica a lo largo de los siglos— es el libro medieval "Shulján Aruj" (שֻׂלְחָן עָרוּךְ, "la mesa servida"). Los mandamientos de la Halajá comandan el ciclo íntegro de la vida judía observante, desde la circuncisión al nacer (Génesis 17:10), pasando por la alimentación (la Cashrut, כַּשְׁרוּת, Levítico 11:1-47), la vida íntima (Levítico 12:1-8), la vestimenta (Levítico 19:19), y así todos los hitos principales de la vida del hombre, hasta su muerte.
La plegaria más solemne de la religión judía, que plasma la esencia misma de la creencia monoteísta, aparece en el quinto y último libro de la Torá: "Oye, Israel, el señor es nuestro Dios, el señor es Uno" (שְׁמַע יִשְׂרָאֵל, ה' אֱלֹהֵינוּ, ה' אֶחָד; Shemá Israel, Adonai Eloheinu, Adonai Ejad Deuteronomio 6:4). Los creyentes la recitan dos veces por día, en las oraciones de la madrugada y del atardecer.
El símbolo judío de nuestros días por excelencia es la estrella de David (מָגֶן דָוִד, Maguén David, "escudo de David", véase en la plantilla de arriba), llamado así por la creencia de que el rey David lo adoptó como símbolo de armas en su escudo de guerra y en el de sus soldados, aunque aparece con su significado actual muchísimo más tarde, hacia la Edad Media. El símbolo conocido más antiguo del judaísmo es el candelabro ritual de siete brazos (מְנוֹרָה, la Menorá), emplazado antiguamente en el Tabernáculo (Éxodo 25:31-40), y luego en el Templo de Jerusalén (1Reyes 7:49).
La vida judía se rige por un calendario basado en la combinación del ciclo mensual lunar y del año solar, cuyos orígenes se remontan a tiempos bíblicos, y por el cual se rigen las festividades y ritos de la religión hasta el día de hoy.

Kipá (solideo tradicional judío) y Menorá (candelabro ritual de siete brazos), dos de los más conocidos símbolos de la tradición judíaLa festividad judía más venerada es el Shabat (del hebreo שַׂבָּת, sábado, "reposo, cese de actividad", Génesis 2:2-3), considerado sagrado y superado, en solemnidad, sólo por el Día del Perdón o Yom Kipur, precisamente llamado también "Sábado de sábados". Su relevancia en la vida judía es tal que está incluido entre los Diez Mandamientos, que se estiman palabra divina (Éxodo 20:8-11, Deuteronomio 5:12-15).
El liderazgo de la comunidad judía tradicional está en manos del rabino, persona culta y docta en la Halajá que conduce a sus acólitos no sólo en lo espiritual y religioso, celebrando el culto judío, sus festividades y celebraciones, sino que se gana el respeto de su grey como autoridad moral y líder comunitario, brindando consejo, solucionando problemas y dirimiendo todos los conflictos que pudiesen suscitarse entre sus miembros.
El culto judío se celebra en el templo o sinagoga, que sirve asimismo de lugar de reunión y encuentro comunitario, para cuyo fin el rezo en público requiere de un mínimo de diez varones. La sinagoga sustituye en tal función al Templo de Jerusalén, destruido en el año 70 y lugar único de oración y peregrinación hasta su desaparición física. Del mismo modo, los sacrificios rituales que allí se efectuaban fueron reemplazados por sendas plegarias, que el judío piadoso eleva tres veces al día: al alba (שַׂחֲרִית, Shajarit), por la tarde (מִנְחָה, Minjá) y al anochecer (עַרְבִית, Arvit). En días festivos se agrega una cuarta a media mañana (מוּסָף, Musaf), y sólo en Yom Kipur se cierra la celebración con una quinta plegaria (נְעִילָה, Ne'ilá).
La religión y el pueblo judío consagraron desde siempre a la tierra de Israel, la tierra sagrada, como uno de sus ejes principales, ya desde sus mismos albores (Génesis 12:7), convirtiéndose ésta en parte integral de la idiosincrasia judía: el mundo se divide entre la Tierra Santa y todo el resto, llamado diáspora. Así, las sinagogas de todo el mundo se construyen de cara a Israel; los rezos y festividades concuerdan con su clima y sus estaciones; gran parte de los preceptos pueden cumplirse sólo al pisar su suelo, por nombrar algunos pocos. Dentro de la tierra de Israel ocupa Jerusalén un lugar único en la devoción judía, y dentro de la ciudad los restos del Templo de Salomón, el llamado "Muro de los Lamentos", es considerado el más sagrado de los sitios. Comparten con Jerusalén su condición de santidad, en menor medida, también las ciudades de Hebrón, Safed y Tiberíades.
El pueblo judío se identificó desde un principio con la lengua hebrea, considerada "lengua sagrada" (לְשׁוֹן הַקּׁדֶשׁ, leshón hakódesh), en la que están escritas la Torá y la mayor parte de la literatura judía. Relegada a condición de lengua muerta durante siglos, reservada a la oración, a la literatura y a los textos jurídicos y teológicos, fue recuperada como lengua hablada y modernizada con el resurgir del sionismo y adoptada como lengua oficial del Estado de Israel.






Evangelismo







Las Iglesias evangélicas o movimiento evangélico son diversas congregaciones cristianas que se hallan difundidas por todo el mundo y presentan distintos grados de diferenciación entre sí, que normalmente son leves. Su tendencia es sin dudas protestante, caracterizadas por un énfasis en la evangelización, una experiencia personal de conversión, con una fe bíblicamente orientada y una creencia en la relevancia de la fe cristiana en temas culturales. Desde fines del siglo XX y durante principios del siglo XXI, a las personas, iglesias y movimientos sociales protestantes comúnmente se les llama evangélicos en contraste al protestantismo liberal y aquellos que son cambiados a través de la Palabra de Dios.


Doctrina

La Biblia es aceptada como fidedigna y la última autoridad en materia de fe y práctica. La doctrina de la Reforma Protestante de la sola scriptura y la sola fide son primarias. La historicidad de los milagros de Jesús y el nacimiento virginal, crucifixión, resurrección, y la Segunda Venida son afirmadas, aunque hay una variedad de entendimientos del fin de los tiempos y de escatología.

Comentaristas e historiadores describen cuatro características de los evangélicos:

Énfasis en la experiencia de la conversión, también llamado nuevo nacimiento, de acuerdo a Juan 3:3. Por ende los evangélicos a menudo se refieren a sí mismos como cristianos nacidos de nuevo. Se dice que esta experiencia es recibida "sólo por fe" y que es dada por Dios como resultado sólo de Su gracia.
El canon protestante de la Biblia como la única o primaria fuente de autoridad religiosa, como una revelación de Dios a la humanidad. Se da énfasis a la profecía bíblica, especialmente si es interpretada de acuerdo al dispensacionalismo. Por ende, la doctrina de la "sola scriptura" es apoyada y enfatizada.
Fomento de la evangelización (acto de compartir las creencias de uno o de anunciar las buenas nuevas) en un trabajo misionero organizado o por reuniones personales y relaciones con otros.
Un foco central en el trabajo redentor de Cristo en la cruz como el único medio para la salvación y el perdón de los pecados. Por que el único puente para llegar a Dios es Jesús.Filipenses 4:13
Estas características son similares al Cuadrilátero Bebbington identificado en su estudio de la evangelización británica.

John Green, director del Instituto de Políticas Aplicadas Ray C. Bliss de la Universidad de Akron en Ohio, publicó en 2004 en el American Religious Landscape Report [1] que a pesar de las variantes existentes, los evangélicos en Estados Unidos generalmente adhieren a cuatro creencias claves:

Infalibilidad bíblica
La salvación es por pura Gracia Divina y se recibe por medio de la fe en Jesús y no como consecuencia de buenas obras (las buenas obras son consecuencia de una salvación y fe genuina).
Los individuos (sobre una edad de responsabilidad) deben confiar personalmente en Jesucristo para la salvación.
Todos los cristianos están comisionados para evangelizar.
Con respecto a la "Infalibilidad bíblica", una cumbre se realizó en Chicago en 1978. La Declaración de Infalibilidad Bíblica de Chicago fue firmada por cerca de 300 estudiosos evangélicos notables. No hay consenso absoluto entre los evangélicos sobre la infalibilidad bíblica; sin embargo, hay una aceptación general de la autoridad de la Biblia.



Protestantismo




Se denominó Protestantismo a la revolución religiosa planteada a principios del siglo XVI en contra de la Iglesia Católica, y que provocó la fractura de la unidad religiosa europea.

Un monje, Martín Lutero, profesor de Teología, encabezó el movimiento, argumentando que la Iglesia se había separado de las enseñanzas bíblicas de Jesús, en quién se basa el cristianismo, desafiando la autoridad del Papado.

Su ruptura con la Iglesia Católica-Romana puso en marcha la Reforma Protestante, con doctrinas como el sacerdocio universal, que implicaba una relación personal directa del individuo con Dios sin ninguna institución de por medio o la libre interpretación de las Sagradas Escrituras
En la Suiza de habla alemana, Ulrico Zuinglio, Ecolampadio y otros comenzaron también un intento de reforma de la Iglesia Católica, de carácter más profundo y enriquecido por una teología mucho más elaborada.

Juan Calvino fue el dirigente más destacado de la Reforma Protestante en Suiza. La Reforma que se había iniciado casi simultáneamente en Zurich (Cantón de habla alemana) y Ginebra (francófona) fue extendiéndose gracias al trabajo de muchos pastores y reformadores de la Iglesia por todos los países vecinos. Incluso llegó hasta Escocia gracias al esfuerzo misionero del reverendo escocés John Knox que se formó en Ginebra.

La Iglesia de Inglaterra no se dejó influir en un primer momento por el protestantismo, pero tras su ruptura con la Iglesia de Roma, comenzó un paulatino y vacilante acercamiento hacia los ideales reformados. Actualmente las iglesias de la Comunión Anglicana se declaran claramente reformadas.

Fuera de ese protestantismo, que muchos estudiosos denominan "magisterial", se dio otra vertiente, que se distinguió tanto del catolicismo romano como de las iglesias protestantes de carácter nacional. Esta corriente recibe el nombre de Reforma Radical. El historiador George Williams diferencia a su vez las siguientes corrientes dentro de esta Reforma: Espiritualistas, Racionalistas y Anabautistas. Los anabautistas rechazaron la unión de la iglesia cristiana con el Estado y repudiaron el bautismo infantil, constituyéndose en iglesias independientes o segregadas. El mayor aporte a la modernidad descansaría en su persistente promoción de la separación entre la iglesia cristiana y el estado, la libertad religiosa personal y el ejercicio de un gobierno plenamente democrático en sus congregaciones.

Así convivieron en toda Europa dos movimientos protestantes diferenciados. El movimiento reformado, liderado por las Iglesias reformadas y luteranas, y el movimiento radical que acabaría desarrollándose en grupos separatistas como los menonitas.


Doctrinas

El protestantismo tiene como pilar básico de su fe la Biblia, entendida como Palabra de Dios descansando toda su teología en tres principios generales y dos particulares que son exclusivos de la teología reformada (Tradicionalmente enunciados en latín):

Sola Scriptura: La Biblia es la única máxima autoridad en temas de fe, moral y conciencia.
Sola Fide: La fe en la obra expiatoria de Jesucristo es la única necesidad que tiene el ser humano para salvar su alma eterna de la condenación.
Solus Christus: Únicamente Cristo es quien nos da la vida eterna. No hay vida eterna sin Él.
[editar] Diferencias entre las iglesias protestantes y la Iglesia Católica
No se reconoce la autoridad del Sumo Pontífice católico, el Papa, como vicario de Cristo en la Tierra ni a ninguno de los Patriarcas de la Iglesia Ortodoxa.
La Biblia es la fuente única de autoridad, Sola Scriptura, la tradición eclesiástica no tiene ninguna validez si no está sustentada y justificada en la Biblia.
Las decisiones de los concilios no tienen autoridad si no se sustentan en doctrinas bíblicas.
Para salvarse no son necesarias las obras ni la caridad. Sólo aceptar a Cristo como Salvador Personal, las buenas obras son fruto de la conversion real al Cristianismo.
El servicio o culto carece de un orden litúrgico necesario.
No se cree o venera imagenes (virgenes, santos, personas famosas, personas místicas, etc.). Esto está basado en muchos versiculos biblicos. El fundamental está en «No harás para ti imágenes... no te inclinarás ante ellas ni las servirás...» de los diez mandamientos.
El acto de arrepentimiento no requiere una confesión con un sacerdote, sino es un acto intimo entre Dios y las personas, mediante oraciones.
No se bautiza a los recién nacidos y los que lo son deben bautizarse de nuevo. En general se considera como una decisión consciente, pero que no tiene validez para salvar.
El canon de la Biblia para los protestantes es de 66 libros, ya que únicamente se aceptan como inspirados aquellos libros que son propios de la Tanach hebrea (Antiguo testamento para los cristianos), de acuerdo a la tradición jerosolimitana, y no de acuerdo a la tradición griega (Biblia de los Setenta), que es la que sigue la Iglesia Católica. Estos libros rechazados por los protestantes son llamadoas deuterocanónicos o apócrifos.
La estructura interna de las organizaciones protestantes rara vez coincide con la católica, no existiendo cardenales, obispos, papas o curas.

En un principio los protestantes expresaron sus posiciones doctrinales por medio de Confesiones de Fe, breves documentos apologéticos. Las Confesiones de Augsburgo expresaron la doctrina luterana. Las confesiones reformadas incluyen también la Confesión Escocesa (1560), La Segunda Confesión Helvética (1531) y la Confesión de Fe de Westminster (1647). Los Treinta y Nueve Artículos de Religión de la Iglesia de Inglaterra también suelen ser considerados reformados. La Declaración Teológica de Barmen, contra el régimen Nazi, y la Breve Declaración de Fe de la Iglesia Presbiteriana en Estados Unidos son ejemplos de declaraciones recientes.

La enseñanza religiosa se fundamentó en catecismos. El Catecismo de Heidelberg y el Mayor y Menor de Westminster son instrumentos reformados para enseñanza de adultos e infantes en las Iglesias.

Algunas de las doctrinas de la Iglesia Católica medieval rechazadas por el protestantismo al no considerar que aparecen en la Biblia son: el Purgatorio, la supremacía papal, las oraciones por los muertos, la intercesión de los santos, la asunción de María y su virginidad perpetua, asimismo la veneración de estos últimos, tal como el resto de los hombres, y porque contradecía al primer mandamiento "No tendrás dioses ajenos delante de mí" (Ex. 20:3). Rechazo asi la realización, veneración o culto a las imagenes, a menos que así Dios lo solicitara (exodo25-18-22).

En las iglesias de teología reformada se enfatizó la doctrina bíblica expuesta por San Agustín de la elección, que establece que la salvación es por pura gracia (favor inmerecido) de Dios, sin obras. La autoridad de las iglesias protestantes se entendió como obediencia únicamente a la Biblia, sujeta a la interpretación personal, y no como una transmisión mecánica de los poderes de los apóstoles a sus sucesores.

No obstante Lutero se muestra en acuerdo con numerosas doctrinas de la iglesia católica, doctrinas que se conservan en muchas de las iglesias protestantes de la actualidad.

Dirigentes

Los dirigentes del movimiento fueron, entre otros, Ulrico Zuinglio, Juan Calvino.




Espirtismo
El espiritismo, también llamado doctrina espírita o doctrina de los espíritus es una doctrina filosófica nacida en Francia a mediados del siglo XIX. Esta doctrina está basada en los libros escritos por el espiritista francés Allán Kardec. El espiritismo se autodefine como una «ciencia» de observación y una doctrina filosófica. Según su fundador es la «ciencia que trata la naturaleza, origen y destino de los espíritus, así como sus relaciones con el mundo corporal. Como filosofía, comprende todas las consecuencias morales que dimanan de es mismas relaciones».

La doctrina espiritista tiene adherentes en varios países alrededor del mundoEl termino «espiritismo» (del francés spiritisme, de spirit: ‘espíritu’; e isme: ‘doctrina’) surgió como un neologismo, más precisamente un porte-manteau, creado por el francés Allán Kardec para nombrar a específicamente a la doctrina de los espíritus, el cuerpo de ideas recopiladas y codificadas por él en El libro de los espíritus (1857).[2]

Vale la pena considerar también que el spiritisme francés y el spiritism inglés son dos doctrinas independientes, pero muy similares, en sus principios y definición, y ambos términos se traducen al español indistintamente como espiritismo.[3] En la actualidad el spiritism inglés es totalmente indistinguible del spiritisme francés.

Sin embargo, la utilización del término, cuya raíz es común a diversas naciones occidentales de origen latino o anglosajón, hizo que él fuese incorporado rápidamente al uso cotidiano para designar todo lo que tenia relación con la comunicación con los espíritus. Así por espiritismo, hoy se identifica a las varias doctrinas religiosas y filosóficas que creen en la sobrevivencia del espíritu (alma) después de la muerte del cuerpo físico, y, principalmente, en la posibilidad de comunicar con ellos, causal o deliberadamente, vía rituales o naturalmente

Doctrna

Los principios fundamentos del espiritismo contenidos en sus obras fundamentales son:

La existencia y unicidad de Dios
La existencia de los espíritus: El hombre es un espíritu ligado a un cuerpo (mediante una conexión denominada periespíritu). Los espíritas definen con el término alma al espíritu cuando esta ligado a un cuerpo (es decir cuando esta encarnado). El espíritu es un ser inteligente, individual (antes y después de la muerte) e inmortal.
La reencarnación: es el proceso natural que permite vivir sucesivas veces; según el espiritismo con la función de permitir el perfeccionamiento de los espíritus, vinculada a una ley de causa y efecto.
Comunicabilidad de los espíritus (mediumnidad): La posibilidad de comunicar con los espíritus encarnados (vivos) y desencarnados (muertos) mediante la mediumnidad.
Ley de causa y efecto, comprendida como mecanismo de retribución ética universal a todos los espíritus, según la cual nuestra condición actual es el resultado de nuestros actos pasados.
La pluralidad de mundos habitados. La tierra no es el único planeta con vida en el universo.
Además de esto se pueden aceptar como características secundarias:[4]

El concepto de creación igualitaria de todos los espíritus, “simples e ignorantes” en su origen, y destinados invariablemente a la perfección, con aptitudes idénticas para el bien o para el mal, dado el libre albedrío (Este concepto derriba la creencia en ángeles o demonios como seres creados aparte y condenados eternamente al bien o al mal)[5]
La noción de que los espíritus son responsables de sus actos durante toda su existencia.
Evolución o progreso del espíritu en un proceso análogo y complementario de la evolución biológica.
No existe el cielo, el infierno o purgatorio, el estado intelectual, moral y psicológico del individuo determina su felicidad o infelicidad relativas después de la muerte.[6]
Jesús es considerado por los espíritas como un modelo y guía moral para la humanidad.[7] El espiritismo no acepta el dogma de la Santísima Trinidad, considera que Jesús es un espíritu al igual que los hombres, pero en un estado evolutivo muy superior.
La moral de Cristo, contenida en el Evangelio, es el camino para la evolución segura de todos los hombres, y su práctica es la solución para todos los problemas humanos y es el objetivo a ser alcanzado por toda la humanidad.
Caracteres de las reuniones espíritas[4] [8] [editar]Ausencia de jerarquía sacerdotal. No hay ningún hombre que sea intermediario entre Dios y los hombres.
Total ausencia de culto a imágenes, altares, etc.
Ausencia de cualquier ritual: bautismo, casamiento, etc.
Incentivo al respeto y tolerancia de todas las religiones. Este hecho mas la flexibilidad del espiritismo hace que este sea mantenido como una segunda religión por muchos.
Incentivo de la instrucción y educación científica, filosófica y moral. En el espiritismo la lectura de libros y el estudio es muy importante.[9]
Incentivo de la practica de la solidaridad y del perfeccionamiento moral del individuo.
La práctica espírita es gratuita y sin ánimo de lucro.
Obras básicas[10] [editar]Los historiadores Henri Sausse,[11] Francisco Thiesen y Zêus Wantuil,[3] [12] coinciden en el hecho de que Allán Kardec no fue el autor intelectual de la mayor parte de lo contenido en las obras básicas. Él recibió en 1855 de Carlotti y de un grupo de seguidores, 50 cuadernos conteniendo relatos de experiencias y comunicaciones diversas, obtenidas a través de diversos médiums, de almas que se decían personas muertas. Allán Kardec analizó, ordenó y completó, con la información concordante obtenida de los espíritus «a través de diversos médiums, desconocidos entre sí, y en distintas partes del mundo»,[2] organizando estos trabajos en 5 obras, consideradas básicas para el espiritismo.

Puede considerarse que los verdaderos autores de la mayor parte de los textos espiritistas han sido los espíritus (o los médiums, según lo que prefiera el lector). Los espíritas reconocen a Allán Kardec como el codificador de la doctrina espírita, no como el creador de la misma.

Las 5 obras básicas, conocidas como Pentateuco kardecista son:

El libro de los espíritus [editar]Primera edición: 18 de abril de 1857

En su primera página se lee: «Contiene: los principios de la doctrina espírita. Sobre la inmortalidad del alma, la naturaleza de los espíritus y sus relaciones con los hombres, las leyes morales, la vida presente, la vida futura y el porvenir de la humanidad, según la enseñanza dada por los espíritus superiores con la ayuda de diversos médiums. Recopilada y puesta en orden por Allán Kardec».[2]

Este libro se ordena en forma de preguntas y respuestas abarcando los mas diversos temas con sus 1019 preguntas.

El libro de los médiums [editar]Primera edición: enero de 1861

En su portada se establece su contenido: «Guía de los médiums y de los evocadores. Contiene la enseñanza de los espíritus sobre la teoría de todos los géneros de manifestaciones, los medios de comunicarse con el mundo invisible, el desarrollo de la mediumnidad, las dificultades y los escollos que se pueden encontrar en la practica del espiritismo. Continuación de “El libro de los espíritus”; por Allán Kardec».

Esta obra trata de las manifestaciones espíritas y de los médiums, por tanto, de la parte fenoménica del espiritismo, y lo caracteriza como «ciencia» de observación que analiza las relaciones entre el mundo corpóreo y el mundo invisible o espiritual.

El Evangelio según el espiritismo [editar]Primera edición: abril de 1864

«Contiene la explicación de las máximas morales de Cristo, su concordancia con el espiritismo y su aplicación a las diversas posiciones de la vida».[14]

En su contratapa de la edición moderna (2001) se lee: «Esta obra define la esencia religiosa de la doctrina espírita, como verdadero cristianismo, restaurado por la interpretación que los espíritus dieron a los textos evangélicos. Ella muestra el poder del amor en las mas diversas situaciones de la vida, cuando dejamos que ese sentimiento divino guíe nuestras manos y nuestros pasos, para servir al prójimo, resultando de ello que todo se equilibre a nuestro alrededor».

El cielo y el infierno [editar]Titulo original: El cielo y el infierno o la justicia divina según el espiritismo Primera edición: agosto de 1865

«Contiene: El examen comparado de las doctrinas sobre el transito de la vida corporal a la vida espiritual, las penas y las recompensas futuras, los ángeles y los demonios, las penas eternas, etc., seguido de numerosos ejemplos sobre la situación real del alma durante y después de la muerte. Además entre otros como la revista espírita y algunos otros literarios en su doctrina espírita».[6]

¿Cuál es el destino del hombre después de la muerte física? ¿Cuáles serían las causas del temor a la muerte? ¿Existe el Cielo y el Infierno? ¿Merece crédito la antigua creencia en los ángeles y demonios? ¿Cómo procede la justicia divina? Estas y otras cuestiones relacionadas son debidamente esclarecidas, en la primera parte de esta obra, a la luz de la lógica y de las enseñanzas de los espíritus. En la segunda parte, titulada «Ejemplos Kardec» registra numerosas comunicaciones de espíritus: clasificados por categorías, tales como: felices, sufridores, arrepentidos, endurecidos y suicidas- que ejemplifican la doctrina expuesta anteriormente.

La Génesis [editar]Titulo original: La génesis, los milagros y las profecías según el espiritismo.
(El artículo femenino «la» se utiliza para diferenciarlo del Génesis bíblico).

Primera edición: enero de 1868

Trata asuntos como: Dios y la visón de los hombres sobre su existencia y naturaleza, la Providencia Divina, el bien y el mal, el espacio y el tiempo, la formación de los mundos, la génesis orgánica y la génesis espiritual, los milagros y su explicación, la superioridad de la naturaleza de Jesús y la desaparición de su cuerpo, y muchos otros asuntos.




Bahismo






El bahaísmo,[1] también denominado como behaísmo o fe bahá'í, es una religión monoteísta cuyos fieles siguen las enseñanzas de Bahá'u'lláh, su profeta y fundador. Bahá'u'lláh enseñó que hay un único Dios que va revelando su voluntad a la humanidad de manera progresiva. Según el punto de vista bahaí, cada una de las grandes religiones introducidas por los Mensajeros de Dios —como Moisés, Krishna, Buda Gautama, Zoroastro, Jesucristo, Mahoma y El Báb— constituyen etapas sucesivas en el desarrollo espiritual de la civilización. Los bahaíes creen que Bahá'u'lláh ha sido el más reciente mensajero de esta saga y que sus enseñanzas están orientadas a los nuevos retos morales y espirituales de nuestra época. Como tal, el bahaísmo se incluye entre las religiones abrahámicas.

Según el Anuario de la Enciclopedia Británica de 1992, el bahaísmo es la segunda religión más extendida en el mundo entre las religiones independientes, de acuerdo al número de países en que se encuentra representada: está establecida en 247 países y territorios. Los bahaíes provienen de entre más de 2.100 grupos étnicos, raciales y tribales, y totalizan aproximadamente seis millones de fieles en el mundo. Los principales pasajes de las textos sagrados bahaíes se han traducido a 802 idiomas. La idea central del bahaísmo gira en torno a la humanidad como una única raza y al día de su unificación en una sociedad mundial.


Doctrinas

En 1844 el profeta persa Siyyid `Alí-Muhammad, que tomó el título de "El Báb" (en árabe ‘la puerta’), instituyó una nueva religión. Ésta era distinta del islam, aunque surgió de su seno, de igual modo que el cristianismo surgió del seno del judaísmo y el budismo del hinduismo. Los seguidores de El Báb fueron conocidos como "babíes" y su religión como babismo; tuvo sus propias escrituras y enseñanzas religiosas, aunque no obstante fue muy efímera. Según El Báb, su misión principal era preparar el camino para "aquel al que Dios ha de manifestarse", el que fue prometido en las escrituras sagradas de todas las grandes religiones del mundo.

El creciente número de personas que se adherían a estas nuevas enseñanzas alarmó a las autoridades políticas y religiosas de Persia. El Báb y sus seguidores fueron perseguidos, siendo encarcelado y finalmente fusilado en Tabriz, Persia (actual Irán) el 9 de julio de 1850. Su misión duró seis años.

Bahá'u'lláh

Mírzá Husayn-`Alí, a quien El Báb dio el título de Bahá'u'lláh (en árabe ‘gloria de Dios’), era un noble y uno de los primeros seguidores importantes de El Báb. Fue arrestado y encarcelado en 1852 durante una gran persecución contra los babíes. En su confinamiento en las mazmorras del Síyah-Chál en Teherán, creyó recibir los primeros indicios de que él mismo era quien había sido profetizado por El Báb. Once años después, exiliado en Bagdad (entonces parte del Imperio otomano), anunció de manera formal su misión a su familia y a un pequeño grupo de seguidores.

La maquinación de las autoridades persas y otomanas fueron empujando a Bahá'u'lláh de exilio en exilio: de Bagdad a Estambul, luego a Edirne y finalmente a la colonia penal de Acre (actual Israel) en 1868. Bahá'u'lláh permaneció en Acre hasta su fallecimiento el 29 de mayo de 1892, tras cuarenta años de exilio y confinamiento. El bahaísmo considera su sepulcro en las afueras de la ciudad como el lugar más sagrado del mundo. Los fieles realizan sus plegarias cada día orientados en la dirección de ese lugar.

El otro lugar santo del bahaísmo en Israel es la tumba o Santuario de El Báb, en la ladera del Monte Carmelo en Haifa. Los restos mortales de El Báb fueron trasladados en secreto desde Persia hasta Tierra Santa y enterrados en el santuario construido y diseñado para ese propósito por Bahá'u'lláh.

Bahá'u'lláh escribió el equivalente a más de cien volúmenes de textos que el bahaísmo considera inspirados por Dios, tanto en árabe como en persa. El principal repertorio de las leyes de la revelación de Bahá'u'lláh es el Kítab-i-Aqdas (el libro más sagrado). El segundo en importancia es el Kitab-i-Iqan, compuesto en Bagdad y que reúne los rasgos elementales de la teología bahaí.

`Abdu'l-Bahá

Abdu'l-Baha, el hijo de Bahá'u'lláh.Antes de fallecer, Bahá'u'lláh nombró como sucesor y único intérprete de sus enseñanzas a su hijo mayor `Abdu'l-Bahá. Bahá'u'lláh lo designó "centro del convenio" y mandó a todos los bahaíes que lo considerasen "cabeza de la fe". Sin embargo, Bahá'u'lláh siguió siendo el único profeta del bahaísmo. En el bahaísmo, el término "Convenio" hace referencia a la promesa de Dios de enviar profetas para hablar a través de ellos, así como a la sucesión de autoridad de Bahá'u'lláh a `Abdu'l-Bahá y de `Abdu'l-Bahá a la Guardianía y la Casa Universal de Justicia.

Aquellos que niegan y se rebelan públicamente contra la sucesión establecida de autoridad con la intención de hacerse con el liderazgo suelen ser declarados "quebrantadores del convenio" y expulsados de la comunidad bahaí. Según las enseñanzas religiosas del bahaísmo, el objetivo del convenio es salvaguardar la unidad de la comunidad bahaí y protegerla frente a posibles cismas. Algunos critican el uso de la amenaza de declaración de quebrantador del convenio por parte de las autoridades religiosas bahaí como medio para coartar la libertad de expresión.

`Abdu'l-Bahá había compartido con su padre el exilio y la cárcel. Su confinamiento duró hasta que fue excarcelado con motivo de la revolución de los Jóvenes Turcos en 1908. Poco después de su liberación, `Abdu'l-Bahá viaja a Europa y a los Estados Unidos para proclamar las enseñanzas de su padre e impulsar el desarrollo de las incipientes comunidades bahaíes que habían surgido en varios sitios de Europa, Estados Unidos y Canadá. Muchas de sus conferencias y charlas fueron grabadas y se han publicado en libros bajo los títulos de La sabiduría de `Abdu'l-Bahá y La promulgación de la paz universal. Otra de las obras de `Abdu'l-Bahá, que sentó las bases de la expansión y consolidación de la comunidad mundial baha'í, es una serie de documentos llamados Tablas del plan divino. También mantuvo una copiosa correspondencia con personas y comunidades bahaíes durante muchos años, y muchas de esas cartas o Tablas se han traducido y publicado en varias lenguas.



Sijismo



Doctrina

La doctrina básica del sijismo consiste en la creencia en un único dios y en las enseñanzas de los diez gurús del sijismo, recogidas en el libro sagrado de los sijs, el Gurú Granth Sahib. El sijismo combina el monoteísmo estricto (de origen musulmán) con tradiciones hindúes.

El número de sijs en el mundo se estima en unos 23 millones, lo cual hace del sijismo la quinta religión mundial. Unos 19 millones viven en India, y la mayor parte de éstos, en el estado de Panyab. La región de Panyab incluye también una parte de Pakistán, pero la mayor parte de los sijs que vivían en el territorio actual de Pakistán emigraron a India tras la partición de la India británica en 1947 para evitar las persecuciones religiosas. Existen numerosas comunidades sijs en el Reino Unido, en Estados Unidos y en Canadá. También son una minoría importante en Malasia y Singapur.

La forma literaria de la lengua panyabí, escrita en alfabeto gurmukhi, está muy ligada a la religión sij. De hecho, los hablantes de panyabí hindúes o musulmanes utilizan por lo general el hindi y el urdu, respectivamente, como lenguas escritas. Son principalmente los sijs quienes escriben en panyabí.

Tras las elecciones indias de 2004, el Dr. Manmohan Singh se ha convertido en el primer sij que ocupa el puesto de Primer Ministro de la India. Es también el segundo no hindú en ocupar el cargo (después de la católica Sonia Gandhi).

Nombre [editar]En muchos medios de comunicación en español se ha promovido el uso de las grafías "sij" y "sijismo", que han sido aceptadas por el diccionario de la Real Academia Española en una edición reciente.

No obstante, esta adaptación al español no es fiel al valor fonético de la secuencia consonántica "kh" empleada en la trasliteración del panyabí, que no representa el sonido de la "j" castellana, sino el sonido "k" seguido de una leve aspiración (IPA /kːʰ/). Esta transliteración inexacta "j" (como en "sij") se debe a que en algunos sistemas de transliteración (por ejemplo del ruso, árabe o persa) al inglés y al francés, el dígrafo "kh" se ha empleado para representar un sonido similar al de la jota castellana. En cambio en las lenguas índicas —como el panyabí— el dígrafo "kh" transcribe la versión aspirada del fonema /k/, que en español debería escribirse "kj": sikj y sikjismo.

Historia

El fundador del sijismo, Gurú Nanak, nació en 1469 en el seno de una familia hindú en el nordeste de la India. Tras cuatro largos viajes en direcciones opuestas a Tíbet, Sri Lanka, Bengala, y a La Meca y Bagdad, Gurú Nanak predicó a hindúes y musulmanes, captando así a un grupo numeroso de discípulos (sijs). Según sus enseñanzas, la religión debería ser un medio de unión entre los seres humanos, pero, en la práctica, ésta parecía enfrentar a las personas. En este sentido, lamentaba de forma especial el enfrentamiento entre hindúes y musulmanes, así como las prácticas de carácter ritual que apartaban al ser humano de la búsqueda de Dios. Su intención era llegar a una realidad más allá de las diferencias superficiales entre las dos religiones. De ahí su famosa máxima «No hay hindúes, no hay musulmanes».

La posición doctrinal de Gurú Nanak se apoya en un hecho básico: la autoridad del Dios único, el Creador. Gurú Nanak llamó a Dios el «Nombre Verdadero» porque quería evitar el uso de un nombre concreto. Gurú Nanak enseñó que el Nombre Verdadero, aunque pueda recibir numerosos nombres en diferentes lugares es, esencialmente, el Dios único, soberano y omnipotente.

Gurú Nanak conservó el concepto hindú de maya (‘ilusión’). El mundo se nos manifiesta como si fuera real, pero la auténtica realidad es sólo la de Dios. El mundo material es una ilusión que impide a muchos seres humanos, abandonados a los placeres materiales, ver la realidad auténtica y única de Dios. La fe sij conserva la creencia hindú en la reencarnación, pero considera que el ser humano puede liberarse del ciclo de reencarnaciones mediante la virtud, que le permite alcanzar la morada del amor de Dios. En cambio los hindúes creen que la virtud sólo produce una reencarnación en mejores condiciones de vida.

Gurú Nanak se opuso al sistema de castas. Sus seguidores le llamaban el «gurú» (‘maestro’). Antes de su muerte, designó a un nuevo gurú como sucesor, encomendándole el liderazgo de la comunidad sij. Este procedimiento de designación de un sucesor fue continuado hasta que el décimo gurú, Gurú Gobind Singh (muerto en 1708), instituyó el culto sij en el año 1699, dotando a los sijs de una identidad como religión independiente y designó al libro sagrado Gurú Granth Sahib como undécimo y definitivo gurú a perpetuidad. La autoría del texto sagrado sij corresponde a los gurúes empezando por el quinto, Gurú Arjan, que en 1604 comenzó la redacción del texto sagrado. El libro sagrado de los sijs tiene la particularidad de haber sido escrito por los propios fundadores de la religión, a diferencia de los libros sagrados de otras grandes religiones. Está escrito íntegramente en alfabeto gurmukhi, pero en varias lenguas: panyabí, sánscrito, boipurí y persa.

El libro original se guarda en el Templo Dorado, pero existe una copia en cada templo. A cada ejemplar se le trata como si fuera una persona viva, acostándolo en una cama en el templo cada noche y abanicándolo.

Los sijs gobernaron teocráticamente una basta confederación de reinos conocida como el Imperio sij, que desapareció tras dos guerras contra los británicos, conocidas como guerras anglo-sij, siendo derrotados en la segunda, tras lo cual el territorio sij fue anexado a la colonia británica de India. En 1980, los movimientos independentistas liderados por nacionalistas sijs que buscaban la creación de un estado soberano sij, llevó a la declaración de independencia de Khalistán, tras lo cual siguió un enfrentamiento con el Ejército de India dirigido por la primera ministra Indira Gandhi, finalizado con la Operación Estrella Azul en la que se bombardeó el Templo Dorado resultando muertos los rebeldes sijs.

La página web Khalistán.net, administrada por independentistas sijs, afirma que en India existe una fuerte discriminación contra esta población que incluye arrestos arbitrarios, abusos sexuales contra mujeres y niñas sijs, palizas, desapariciones, etc. Sin embargo, otros argumentan que esto no es del todo cierto. En todo caso, el actual primer ministro de India es sij.





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